Crónica de una vida anunciada
Héctor Cortijo Fernández
ESCENA 0
Claudia — ¡¿Por qué no dices que eres una mala madre?!
Lidia — Gracias.
Rosa — ¡Porque no soy una mala madre!
Jorge — No hay de qué.
Francisco se despierta.
ESCENA 1
Tanatorio. Sala grande y blanca llena de flores. Al fondo, un ataúd abierto con Francisco muerto dentro. Mesa redonda con unos caramelos en el centro.
Rosa — Cuánta gente.
Jorge — Eso es bueno.
Rosa — Bueno sería que tu padre no estuviera muerto.
Jorge — Lo siento.
Rosa — Un respeto. Qué calor hace aquí.
Jorge — ¿Aquella es la prima Lidia?
Rosa — Te conozco…
Jorge — Sí. Es ella.
Rosa — No mires…
Jorge — ¿Qué pasa?
Rosa — Tu tía Sole, como me enganche no me suelta.
Jorge — A mí me cae muy bien la tía Sole.
Rosa — Tú qué sabrás, si de crío ni la conociste.
Jorge — No la conocí porque no nos llevabais a ningún lado.
Rosa — Tócate los cojones.
Jorge — La boca.
Llega Claudia.
Claudia — ¿Dónde estábais?
Rosa — Tu hermano no encontraba aparcamiento. ¿Dónde vas con esas pintas?
Claudia — ¿Qué más te da?
Rosa — ¿Vaqueros para el velatorio de tu padre?
Claudia — ¿Llegar tarde al velatorio de tu marido?
Jorge — Claudia…
Claudia — (A Jorge) Adivina quién ha venido…
Jorge mira a su madre.
Rosa — Tú sabrás...
Jorge — Ahora vuelvo.
Jorge se va. Rosa se saca un abanico del bolso.
Rosa — Acércame un caramelo de esos, tengo la boca hecha una pasta.
Claudia — ¿De fresa o de limón?
Rosa — ¿No hay de café?
Claudia — No.
Rosa — Pues entonces déjalo.
Claudia — Qué exquisita.
Rosa — Has salido a tu madre.
Pasa alguien por detrás.
Rosa — ¡Ay mi Francisco, qué pena más grande!
Claudia — Una pena, sí…
Rosa — ¿No te afecta o qué?
Claudia — Tenemos que hablar.
Rosa — No me vengas ahora con rollos filosóficos, que a la gente se le muere alguien y se creen poetas.
Claudia — Mamá.
Rosa — ¿No pueden llorar callados como yo? Todo el tiempo lamentándose y subiendo fotos en blanco y negro al Facebook.
Claudia — Cada uno lleva el duelo como puede.
Rosa — Hay gente que ni lo lleva. Mira tu hermano, acabamos de llegar y ya me ha dejado sola. Tú vas a hacer lo mismo.
Claudia — Eso no va a pasar. Mamá…
Rosa — Qué.
Claudia — Tenemos que hablar sobre papá.
Pausa.
Rosa — No creo que sea momento.
Claudia — Nunca lo es.
Rosa — Tu padre no era un mal hombre.
Pausa. Llega Lidia con unas flores en la mano.
Lidia — ¿Cómo estás, Rosa?
Claudia se marcha enfadada.
Lidia — ¿Está bien?
Rosa — Sí.
Lidia — ¿Y tú, Rosa?
Rosa — (exagerando) Muy mal. Ha sido un golpe muy duro. Ay mi Francisco, qué mal lo debió pasar. Con lo joven que era.
Lidia — Ahora está en un lugar mejor.
Rosa — Ojalá haberle disfrutado más.
Lidia — Toda la razón.
Rosa — Murió haciendo lo que más le gustaba.
Lidia — Jugar al pádel.
Rosa — Dormir.
Lidia — Vaya…
Rosa — ¿Qué haces aquí?
Lidia — ¿Perdona?
Rosa — Que qué haces aquí.
Lidia — Daros el pésame.
Rosa — No tuviste suficiente con la última vez.
Lidia — No busco nada.
Rosa — ¿Y esas flores? ¿Son para mí?
Lidia — Para Francisco.
Rosa — (Cortándole) Tienes suerte de que me gusten.
Lidia — Rosa, yo no pretendo…
Rosa — Vete.
Lidia se va. Claudia está llegando.
Claudia — ¿Qué le has dicho?
Rosa — Lo que merece.
Claudia — Qué dura eres.
Rosa — Tu padre ha muerto, tengo que serlo. ¿Por qué has vuelto?
Claudia — ¿No me quieres?
Rosa — No he dicho eso.
Claudia — Lo parecía.
Rosa — No presupongas.
Claudia — ¿Qué quieres decir?
Rosa — ¿Por qué te has ido?
Claudia — Ya lo sabes.
Rosa — Me has dejado sola.
Claudia — Me he alejado seis metros.
Rosa — Respeta a tu madre.
Claudia — ¿Me has respetado tú a mí?
Rosa — Me estás llamando mala madre.
Claudia — ¿En qué momento he dicho eso?
Rosa — No hace falta que lo digas.
Claudia — Te estás poniendo a la defensiva.
Rosa — No necesito defenderme.
Claudia — Ya sabes lo que te voy a decir.
Rosa — No hay nada que decir.
Claudia — Papá abusó de mí.
Pausa. Rosa calla.
Claudia — ¿No vas a decir nada?
Rosa — No hay nada que decir.
Claudia — ¿Me lo estás diciendo en serio?
Rosa — ¿Seguro que no hay caramelos de café?
Claudia — ¡Basta!
Pausa.
Claudia — ¿Lo sabías?
Rosa — No.
Claudia — Mamá.
Rosa — No lo sabía.
Claudia — ¿Entonces por qué cojones no me dejas hablar? Llevo años intentando decírtelo, pero tú te empeñaste en callarme. Dices que te llamo mala madre, cuando me callo lo que realmente pienso.
Rosa — No lo sabía.
Claudia — Lo sabías.
Rosa — (exaltada) ¡No lo sabía!
Pausa.
Rosa — Lo imaginaba. No lo sabía con certeza.
Claudia — ¿Por qué no hiciste nada?
Rosa — Para mí no pasaba nada.
Claudia — A mí me pasaba todo. No estuviste. Nunca has estado.
Rosa — Me estás llamando mala madre.
Claudia — Eres una mala madre.
Rosa — ¿Cuándo?
Claudia — ¿Qué?
Rosa — ¿Cuándo pasó?
Claudia — Baqueira. Jorge y tú estabais esquiando.
Rosa — Joder…
Claudia — Esa fue la primera.
Rosa — ¿La primera?
Claudia — Mi fiesta de cumpleaños. Mis amigas estaban en la piscina. Esa fue la segunda. Cumplía diez años.
Rosa — Yo no estaba en casa…
Claudia — Mi bañador estaba sucio y me lo quitó.
Rosa — Claudia…
Claudia — Cuando me bajó la regla por primera vez.
Rosa — Escúchame…
Claudia — Esa fue la última.
Rosa — ¡Para!
Pausa.
Rosa — No es el momento.
Pausa.
Claudia — Eres una mala madre.
Claudia intenta irse, Rosa le frena.
Claudia — Déjame en paz.
Rosa — No montes un pollo. Aquí no.
Claudia — Ahora, con papá muerto, se puede hablar del tema.
Rosa — La muerte de tu padre nos ha venido bien a todos.
Claudia — ¿Qué dices?
Rosa — Mira a tu hermano, disfrutando como nunca. Y tú con una carga menos.
Claudia — La carga no desaparece.
Rosa — Aprende a vivir con ella.
Claudia — ¿Cuál es tu carga?
Rosa — ¿Qué?
Claudia — “La muerte de tu padre nos ha venido bien a todos”, eso has dicho.
Rosa — Eso he dicho.
Claudia — ¿Cuál es tu carga?
Rosa — Yo no tengo cargas.
Pasa alguien por detrás.
Rosa — ¡Ay, mi marido! ¡Qué pena más grande!
Claudia — Nunca lo has querido.
Rosa — Estaba enamorada.
Claudia — Mentira.
Rosa — Estuve enamorada.
Claudia — ¿Quién es?
Rosa — ¿Quién?
Claudia — No soy tonta.
Rosa — No es el momento.
Claudia — Nunca lo es. ¿Quién es?
Rosa — Pedro.
Claudia — ¿El tío?
Rosa — Tu tío Pedro.
Claudia — ¿Cuándo?
Rosa — ¿Qué más te da?
Claudia — Me preocupo. Tú no.
Rosa — Perdón.
Claudia — ¿Qué?
Rosa — Perdón. No quise verlo.
Claudia — ¿Por qué no hiciste nada?
Rosa — No lo sabía.
Claudia — Lo sabías.
Rosa — Lo intuía.
Claudia — ¿Por qué no hiciste nada?
Rosa — He pedido perdón.
Claudia — No me sirve.
Rosa — Debería.
Claudia — Eres una mala madre.
Rosa — No es el momento.
Claudia — Nunca lo es.
Rosa — He dicho que lo siento.
Claudia — No me sirve. Eres una mala madre.
Rosa — Me vas a dejar sola.
Claudia — Di que eres una mala madre.
Rosa — No hables de tu tío.
Claudia — Es lo único que te importa.
Rosa — De lo tuyo tampoco.
Claudia — Superficial…
Rosa — No tienes razón…
Claudia — Solo te importas tú.
Rosa — Cállate.
Claudia — ¡¿Por qué no dices que eres una mala madre?!
Rosa — ¡Porque no soy una mala madre!
Francisco se despierta.
ESCENA 3
Tanatorio. Sala grande y blanca llena de flores. Al fondo, un ataúd abierto con Francisco muerto dentro. Sillones marrones haciendo una ele.
Lidia — Claudia.
Claudia — Lidia. Hola.
Lidia — Cuánto tiempo.
Claudia — Mucho. ¿Bien?
Lidia — Bien. Yo…
Claudia — No.
Lidia — ¿No?
Claudia — No hace falta.
Lidia — Lo siento por tu padre.
Claudia — Eso, no hace falta eso.
Lidia — Disculpa.
Claudia — ¿Qué haces aquí?
Lidia — ¿Perdona?
Claudia — Mi madre te mata.
Lidia — Lo siento.
Claudia — No hace falta.
Lidia — Quiero decir, disculpa.
Claudia — No hace falta que te disculpes.
Lidia — Está bien.
Pausa. Claudia mira a Lidia.
Claudia — Me alegra verte, prima.
Claudia le da un abrazo a Lidia.
Claudia — Cuánto tiempo.
Lidia — Mucho. ¿Bien?
Claudia — Bien.
Lidia — Me alegra verte.
Claudia — No fue justo.
Lidia — No hace falta.
Claudia — Sé que no, pero no fue justo.
Lidia — Gracias.
Claudia — Te sienta bien el azul.
Lidia — A ti los vaqueros. Mejor que las faldas.
Claudia — No fue tu culpa, era muy cabezón.
Lidia — Solo vengo a daros el pésame.
Claudia — Espero que no.
Lidia — No pretendo nada.
Claudia — Hazlo.
Lidia — Pero tu padre…
Claudia — Mi padre está muerto.
Lidia — Lo siento.
Claudia — No hace falta.
Lidia — Disculpa.
Claudia — De verdad, hazlo.
Lidia — ¿Ese es Jorge?
Claudia — Ya era hora.
Lidia — ¿Todo bien?
Claudia — Llegan tarde.
Claudia se va. Lidia se queda sola, mientras mira hacia ellos. Se arregla un poco el pelo y se acomoda la ropa. Jorge se acerca.
Jorge — Hey.
Lidia — Hey.
Jorge — ¿Cómo…?
Lidia — Estoy bien. ¿Y tú?
Jorge — Estoy.
Lidia — Lo siento.
Pausa. A Jorge le brillan los ojos.
Jorge — Gracias.
Lidia — ¿Todo bien?
Jorge — Sí. Es que…
Lidia — Tu padre ha muerto.
Jorge — No. Te echaba de menos.
Pausa.
Lidia — Pero tu padre…
Jorge — Ya, mi padre…
Pausa.
Lidia — Hey.
Jorge — Hey.
Lidia — ¿Cómo vas con…?
Jorge — No voy.
Lidia — Lo siento.
Jorge — No hace falta.
Lidia — Quiero decir, disculpa.
Pausa.
Jorge — Tu madre…
Lidia — No sabe que he venido.
Jorge — ¿Se lo dirás?
Lidia — Quería veros.
Jorge — Gracias.
Lidia — No hay de qué.
Jorge — No, Lidia, Gracias.
Pausa.
Lidia — Debería decirle algo a tu madre.
Jorge — Claro.
Lidia — Ahora vuelvo.
Jorge — Perfecto.
Lidia se va. Jorge la mira. Vuelve Claudia, alterada.
Jorge — ¿Qué pasa?
Claudia — Mamá.
Jorge — Ya…
Claudia — No se puede hablar con ella.
Jorge — ¿Qué ha dicho?
Claudia — “No es el momento”.
Jorge — Perdón.
Claudia — “No es el momento”, eso es lo que ha dicho.
Jorge — Ah. Vaya. Yo…
Claudia — No hace falta.
Jorge — Lo siento.
Claudia — (enfadada) Eso, no hace falta eso.
Jorge — Tranquilízate.
Claudia — No puedo.
Jorge — Claudia.
Claudia — (nerviosa) ¿Qué?
Pausa.
Jorge — Nada.
Pausa.
Claudia — Lo siento.
Jorge — Basta.
Claudia — ¿Cómo ha ido?
Jorge — ¿El qué?
Claudia — Lidia.
Jorge — Bueno…
Claudia — ¿Bueno?
Jorge — Incómodo.
Claudia — ¿Por?
Jorge — Hacía mucho que no hablábamos.
Claudia — ¿De qué habéis hablado?
Jorge — De nada.
Claudia — Os he visto bien.
Jorge — Ha estado bien.
Jorge sonríe.
Claudia — Mírate.
Jorge — Es que es…
Claudia — ¿Tu prima?
Jorge — Claudia.
Claudia — ¿Miento?
Jorge — No.
Claudia — Aprovecha.
Jorge — ¿Para qué?
Claudia — Papá está muerto.
Jorge — Qué duro.
Claudia — ¿Acaso miento?
Jorge — ¿Crees que es el momento?
Claudia — Nunca es el momento.
Jorge — ¿Entonces?
Claudia — Hazlo.
Jorge — ¿Y tú?
Claudia — Yo también.
Jorge — Entonces es el momento.
Claudia — Nunca es el momento.
Jorge — ¿Lo sabe?
Claudia — No me ha dejado decírselo.
Jorge — Lo sabe.
Claudia — Claro que lo sabe.
Jorge — Ánimo, hermanita.
Claudia — Igualmente, hermanito.
Claudia se va. Lidia vuelve, alterada.
Lidia — Tu madre…
Jorge — Ni caso.
Lidia — Igual no era el momento.
Jorge — Nunca es el momento.
Lidia — Entiendo.
Pausa.
Jorge — Hey.
Lidia — Hey.
Jorge — Hacía mucho que no nos veíamos.
Lidia — Yo te veo.
Jorge — ¿Cómo?
Lidia — Instagram.
Jorge — Qué susto.
Lidia — No te espío.
Jorge — Ojalá.
Lidia — ¿Cómo?
Jorge — Que menos mal.
Lidia — Ya.
Jorge — Yo también te veo.
Lidia — Tú sí me espías.
Jorge — (nervioso) Sí. O sea, no, yo…
Lidia — Instagram.
Jorge — Eso.
Lidia — No te preocupes. Sé que no eres un pervertido.
Jorge — Menos mal. Me viene de familia.
Lidia — ¿Cómo?
Jorge — Que cómo va tu tía.
Lidia — ¿Tu madre?
Jorge — ¿Sí?
Pausa. Ambos ríen a carcajadas.
Lidia — Ella no sé, tú desde luego que no estás bien.
Jorge — Desde luego.
Lidia — Todavía me acuerdo.
Jorge — ¿De qué?
Lidia — De ti.
Jorge — ¿De mí?
Lidia — Cantando.
Jorge — Ay madre.
Lidia — Bajo el balcón.
Jorge — Mi padre casi me mata.
Lidia — ¿Qué cantabas?
Jorge — No hagas esto.
Lidia — Era una balada.
Jorge — Sí.
Lidia — De un grupo que le gustaba a mi madre.
Jorge — Dire Straits.
Lidia — Ese.
Jorge — Romeo and Juliet. Esa era la canción.
Lidia — Sí, pero, ¿cómo era?
Jorge — Lidia…
Lidia — Porfa.
Jorge — ¿Aquí?
Lidia — No nos ve nadie.
Jorge — No sé, yo…
Jorge mira a Lidia. Lidia le devuelve la mirada.
Jorge — (cantando) “A love struck Romeo, sings the streets a serenade, laying everybody low, with a love song that he made. Finds a street light, steps out of the shade, and says something like…”
Lidia — (cantando) “You and me babe, how about it?”
Jorge — ¿Te la sabes?
Lidia — La aprendí.
Jorge — Por tu madre.
Lidia — Por ti.
Pausa.
Jorge — No me hagas esto por favor.
Lidia — Lo siento.
Jorge — No hace falta.
Lidia — Yo no quería…
Jorge — Yo sí.
Lidia — ¿No hay otra opción?
Jorge — No creo.
Lidia — Está bien, me voy.
Jorge — No.
Lidia — ¿No?
Jorge — No.
Lidia — Si no estás seguro me voy.
Jorge — Lidia, no estoy bien.
Lidia — ¿Cómo?
Jorge — Mi padre ha muerto.
Pausa.
Lidia — Lo siento.
Jorge — No hace falta.
Lidia — No, yo…
Jorge — No empecemos otra vez.
Lidia abraza a Jorge.
Lidia — Lo siento.
Pausa. Se siguen abrazando.
Jorge — Estoy cansado.
Lidia va a separarse. Jorge le frena.
Jorge — Del abrazo no, de fingir.
Lidia — No hay otra opción.
Jorge — Sí la hay.
Lidia — Pero tu padre…
Jorge — Mi padre está muerto.
Lidia — No tendría que haber venido.
Jorge — Mi padre está muerto.
Lidia — Me obligó a irme. No querría volver a verme contigo. Tu padre…
Jorge — Lidia. Mi padre está muerto.
Pausa.
Lidia — ¿Estás seguro?
Jorge — Sí.
Lidia — Tal vez no es el momento.
Jorge — Nunca es el momento.
Lidia — Jorge yo…
Jorge — No me digas que lo sientes.
Lidia — Gracias.
Jorge — No hay de qué.
Lidia va a besar a Jorge. Son interrumpidos. Francisco se despierta.