Educación y Formación Profesional

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Un total de 129 centros de Educación Primaria y Secundaria de la Región de Murcia participan este curso en el programa ‘Educar en Justicia’, del Consejo General del Poder Judicial y que desarrolla en la Región de Murcia la Consejería de Educación y Formación Profesional junto al Tribunal Superior de Justicia.

La primera sesión del programa se celebró hoy en el colegio Vistarreal de Molina de Segura y contó con la participación de 90 alumnos de primero de la ESO, que teatralizaron un juicio sobre el caso de la gorra del hincha de fútbol. Al acto asistieron la directora general de Recursos Humanos, Planificación Educativa e Innovación, Carmen Balsas; el magistrado de la sala Civil y Penal nº 1 del Tribunal Superior de Justicia de Murcia, Joaquín Ángel de Domingo; y el presidente de la cooperativa de enseñanza Vistarreal, José Gómez.

‘Educar en Justicia’ ofrece herramientas para la mejora de la convivencia escolar, además de dar visibilidad al funcionamiento del sistema judicial acercando la institución al alumnado. El proyecto cuenta con cuatro modalidades de participación, la A en la que se lleva a cabo el proyecto de Juez de Paz Educativo en el centro; la modalidad B presencial, en la que el magistrado visita el centro y se representa un juicio; la modalidad B online, en la que se ofrece la charla del magistrado por videoconferencia y por último, para el alumnado a partir de cuarto de ESO, la modalidad C, en la que se visita un juicio de menores. Este curso participarán 25 centros en la modalidad B presencial, 45 centros en la modalidad B online y 57 centros educativos de Secundaria en la modalidad C. El proyecto de Juez de Paz lo solicitan los centros educativos.

El principal objetivo es ofrecer a colegios e institutos una herramienta más, de carácter preventivo, que promueva el significado del valor de la justicia en un Estado de derecho. La participación en este programa ha permitido a los centros mejorar la convivencia mediante el desarrollo del diálogo, el consenso y la promoción de experiencias en justicia restaurativa, creándose un mejor clima de convivencia social, formando ciudadanos responsables con conocimientos y habilidades que les capaciten para la resolución de problemas en sus centros educativos y a lo largo de la vida.