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Los grupos de terapia multifamiliar se amplían en la Arrixaca para la atención integral de pacientes con diferentes patologías. Si hace siete años la Arrixaca fue pionera en la instauración de terapia multifamiliar en la rehabilitación de pacientes con daño cerebral adquirido, ahora se diversifica para atender a los enfermos renales y usuarios con enfermedad mental.

Durante el Covid también se formalizó un grupo para abordar las secuelas de la infección y los pacientes con Covid persistente y en septiembre está previsto poner en marcha el cuarto grupo con mujeres con endometriosis.

Las psicólogas clínicas Rosa María Espinosa y Amparo Martínez dirigen las sesiones, que se caracterizan por establecer un espacio terapéutico que incluye la participación conjunta de las personas que sufren el problema que motiva la demanda de ayuda y la de sus allegados, y donde estos dos roles se igualan. La reunión de distintas familias permite aprender por reflejo de otros contextos, el apoyo mutuo y la estimulación vital, en contra del aislamiento social y los estigmas.

Lo original de lo realizado en el área de salud Murcia Oeste resulta de llevar este tipo de abordaje a patologías no relacionadas con la enfermedad mental, sino con procesos orgánicos.

Los grupos se reúnen semanal o quincenalmente. Los pacientes llegan por interconsulta de los servicios médicos respectivos o de manera voluntaria (en el caso de los ingresados en la Unidad psiquiátrica de adultos). Su consolidación evidencia su eficacia y forman parte de la estrategia de humanización del hospital.