Prólogo

Moisés Ruiz Angulo

Ordenanza y representante del PAS en el Consejo Escolar de ESAD Murcia

Cuando se solicita colaboración para este prólogo a una persona como yo, que no soy de escribir, afloran en mí, sentimientos contrarios.

De Felicidad por un lado, porque por fin iba a ver la luz este trabajo inacabado de Antonio Rus Navarro, que se inició hace unos años para ser presentado en la ESAD con motivo del 100 aniversario de las Enseñanzas Artísticas en Murcia.

Quienes hemos tenido la suerte y el placer de conocerle en profundidad, echamos de menos su humor, su "chispa", su manera de relatar las cosas, su amplia cultura, como demostraba en las tertulias que manteníamos; tenía conocimientos, tanto técnicos como artísticos ,abarcando materias tan distintas como son: la informática, electrónica, matemáticas, medicina, música, cine, . etc. En fin, era un tipo más propio del Renacimiento por todo el conocimiento y las destrezas que aglutinaba.

De Tristeza porque me hace rememorar todo lo vivido (sí todo lo vivido, aunque hayamos sido compañeros de trabajo tan solo 30 años). Son tantas las situaciones, las vicisitudes y cosas compartidas que se hace imposible olvidarlas. Antonio dejó su impronta en todos y cada uno de los rincones de esta Escuela. Se implicó completamente en este Centro y participó en tareas más allá de sus obligaciones. Durante muchos años ejerció de responsable de Riesgos Laborales y también representó al Personal de Administración y Servicios en el Consejo Escolar de la Escuela Superior de Arte Dramático de Murcia, hasta el final de sus días. Todo lo hacía con el rigor y la profesionalidad requerida.

Aunque el puesto de trabajo ha sido ocupado por otra persona de gran valía, el vacío que nos dejó, siempre permanecerá en nuestro recuerdo.

Digo trabajo inacabado porque el autor lo concibió como una presentación audiovisual en Power Point, al que sólo le faltó el fondo musical elegido, que no llegó a incorporar debido a su inesperado fallecimiento.

No fue tarea fácil recuperar el archivo. Para no introducir ninguna modificación al trabajo, se optó por plasmar las distintas imágenes en esta edición para que el lector pueda recrearse el tiempo necesario en dichos fotogramas.

Con esta Comparativa en imágenes, el autor nos muestra los detalles de la transformación que ha recibido el viejo Seminario de San Fulgencio para albergar las sedes de la Escuela Superior de Arte Dramático y del Conservatorio de Danza de Murcia; nos muestra el antes y el después de muchas de las estancias del Edificio .

Quienes han conocido La Escuela vieja podrán recordar los espacios tan singulares que tenía el edificio, el estado tan ruinoso que presentaba cuando nos instalamos en él, con zonas impracticables llenas de escombro, sin ventanas, con suelos y techos rotos, por lo que se habilitó una pequeña zona para docencia y las tareas administrativas.

Era tanta la ilusión, la imaginación, el ingenio y el amor de todos los colectivos del Centro, que a pesar de tanta penuria, escasez de espacio útil, medios humanos, materiales y económicos, fueron saliendo promociones de excelentes profesionales de las artes escénicas, que nos dejaron el listón muy alto y que los que hemos cogido el testigo debemos preservar y potenciar, cuidando, respetando y mimando las instalaciones y medios que disponemos con tanta o más ilusión como la de nuestros antecesores.

Esta retrospectiva nos ayudará a recordar el estado de nuestra Sede hasta el año 1992. Con el paréntesis de 1993 hasta 1997 que estuvimos provisionalmente en el Palacio Fontes mientras duraron las obras de rehabilitación. En la Escuela Nueva iniciamos el curso 1997-1998 y desde entonces no ha parado de crecer y mejorar continuando aportando magníficos profesionales al mundo de las artes escénicas.


Moisés Ruiz Angulo y Antonio Rus Navarro